El investigador Joaquín Carreras Navarro ha ganado el III Premio de Investigación Histórica Prebendado Pacheco, organizado por el Ayuntamiento de Tegueste, con un profuso trabajo sobre la vida en la segunda mitad del siglo XX en el municipio, en el que, entre otras cuestiones, se detiene en la relevancia de los charcos de diversos barrancos locales, sobre todo el de Agua de Dios).

En las V Jornadas Prebendado Pacheco, celebradas recientemente en la Villa, el autor resalta que había charcos naturales y otros artificiales o "preparados" por las mujeres para que sirvieran como pequeños lavaderos temporales.

Entre 1950 y 1980, el barranco Agua de Dios tenía unos charcos. El trabajo alude al de Las Vacas, La Fuente, El Rejanero, el del Pilón, Los Patos, La Cera, el de Rafael Perera, Las Tapias, Los Pinos o del Ere, entre otros. Acogían múltiples actividades: aparte de lavaderos, servían para que el ganado bebiera, recoger agua, endulzar chochos, zona de juego y baño, y para plantar ñameras y recoger berros.