Como si la muerte quedase exenta de la crisis, los vecinos de El Rosario que, por desgracia, hayan perdido (que es lo más lógico) a algún familiar y mantengan sus restos en el cementerio local se llevarán, tarde o temprano, un disgusto económico añadido. En virtud del plan financiero municipal 2011-22, aunque sin excesiva difusión hasta ahora en este apartado, el ayuntamiento aplica desde este año una espectacular subida de más del 300% del precio de renovación quinquenal (cada 5 años) de los nichos, que pasan de costar 158,8 a 516,43 euros, subida que, sin sarcasmos, podría deparar una reacción muy sintética: "Para morirse".

Así lo entiende, por lo menos, el portavoz del principal grupo de la oposición, Escolástico Gil (IR-Verdes), quien denuncia que, "con esta subida y otras, el cementerio municipal se convierte en el más caro de la Isla, según las tablas del pasado día 10".

En este sentido, Gil critica con dureza que, en un municipio cercano como Güímar, por ejemplo, el precio por cinco años sea solo de 205,74 euros, mientras que, por 50 años, se paga (a 10 de enero de este año) 723,06. El edil considera que la subida de la ordenanza es totalmente desmedida y lamenta que en la localidad se pague ahora por cinco años lo que en muchas "se hace por 20 o prácticamente a perpetuidad".

Asimismo, censura que la tasa global que se aplica desde ahora, si se incluye la licencia, la inhumación, el tanatorio, el primer alquiler quinquenal y la colocación de la lápida, asciende a 618,33 euros, cantidad que cree desorbitada en un municipio como El Rosario.

Gil también censura que, si bien estas tasas se aprobaron en 2011 junto al resto del citado plan económico para el siguiente decenio, el gobierno "no lo haya difundido hasta ahora y solo sea a través de dos casos concretos que se han topado en los últimos días con ese gran incremento cuando nos hemos enterado de la situación".

En su opinión, una medida de este tipo no solo no está justificada, sino que no corresponde a un gobierno que, por sus siglas (PSOE), se le presupone cierta sensibilidad social.

El Día intentó ayer, sin éxito, contactar con el edil responsable del Cementerio y con la portavoz y concejal de Urbanismo, Ana Lupe Mora.