El alcalde de La Laguna, Fernando Clavijo, firmará en los próximos días la prórroga para 2009 del convenio existente entre el ayuntamiento y la congregación religiosa Siervas de María para conceder una ayuda de 6.000 euros con el fin de sufragar los gastos de funcionamiento que desempeña esta comunidad en el municipio, especialmente para la atención a enfermos en sus domicilios.

La concejala de Bienestar Social, Blanca Pérez, ha destacado "la importancia que tiene para nosotros mantener convenios con las diferentes asociaciones sin ánimo de lucro, congregaciones religiosas y otras instituciones que realizan una importante función social en La Laguna, especialmente para paliar las desigualdades sociales y atender a aquellos que más lo necesitan.

En este sentido, añade Pérez, la cooperación con las Siervas de María permite, en concreto, promover las condiciones necesarias para la atención domiciliaria a los enfermos que así lo precisen, así como el suministro de alimentos a las familias necesitadas con el fin de mejorar su calidad de vida y facilitar su integración social".

Labor altruista

La congregación Siervas de María lleva establecida en La Laguna desde 1899. Se caracteriza tanto por la labor asistencial y altruista que desempeñan cuidando enfermos en horas nocturnas, como también proporcionando ayuda material, especialmente alimentos, a cuantos necesitados acuden a su sede. Atienden también otras necesidades especiales como formación y ayuda a los colectivos más desfavorecidos.

Actualmente son siete religiosas, todas con alguna formación en el ámbito sanitario, quienes realizan la asistencia domiciliaria nocturna cuidando enfermos en el municipio de La Laguna, de forma gratuita e igualitaria, seis noches a la semana.

El convenio que firmará el alcalde permitirá seguir manteniendo una relación fluida y de cooperación con la congregación y garantizar que la atención que proporcionan a todos aquellos enfermos que pueden permanecer en sus domicilios, a pesar de padecer enfermedades invalidantes, teniendo especialmente en cuenta la necesidad de plazas hospitalarias para enfermos de medio y alto requerimiento.

Hay que destacar que la gran labor asistencial de las Siervas de María la han ejercido sin pedir nada a cambio, solamente conformándose con la voluntad, que tristemente y muchas veces, no se ha correspondido con el trabajo realizado. Su servicio, es además, nocturno y es realizado por hermanas de cierta edad.