El paladar del CD Tenerife casi no reconoce el sabor embriagador de la Copa. Desde hace 11 temporadas no accede a tercera ronda. El balance resulta especialmente deprimente si se tiene en cuenta que, en la década posterior, cayó siete veces a las primeras de cambio. Únicamente en tres ocasiones logró dejar en la cuneta al menos a un adversario. Con estos precedentes cercanos, el reto de superar al Alcoyano crece en importancia.

Benítez, el último.- Fue en la campaña del penúltimo ascenso blanquiazul a Primera. Un 13 de diciembre se cruzó el Oviedo en el camino tinerfeño. Juan Jesús y Antonio Hidalgo hicieron los goles. El Tenerife jugó con diez desde el minuto 24, pero el cuadro asturiano solo logró acortar distancias. A continuación, pasó por el Heliodoro el Deportivo de La Coruña. Fue la noche de Simutenkov, aquel ruso tan lleno de calidad como huraño para sus compañeros. Ya en octavos, la competición pasó a disputarse a doble partido. El Mallorca de Luis Aragonés y Eto''o ganó los dos encuentros (0-2 y 2-0), acabando con la "borrachera" copera del equipo que dirigía Rafa Benítez.

5-1 en Lanzarote.- "Vamos, comemos, ganamos y volvemos". Falló por una Pepe Mel, que vaticinó así el viaje a tierras conejeras del 10 de octubre de 2001. Su equipo fue humillado en Arrecife (5-1), con cuatro goles de Maciot. Fue uno de los Primeras que cayó en la primera ronda ante un Segunda B. Ese día fueron eliminados Espanyol, Zaragoza, Betis, Sevilla y Barcelona. Pero ninguno fue goleado de esa manera.

Las prórrogas.- El Numancia fue el verdugo en la 01-02 justo antes de iniciarse un periplo de tres temporadas consecutivas en las que el Tenerife fue apeado en el tiempo extra. El 8 de octubre de 2003 fue un gol de Jonathan Sesma el que permitió pasar al Cádiz en el Heliodoro. En 2004, el conjunto dirigido entonces por Pepe Moré superó al Celta (3-1) en la prórroga para caer, a continuación, ante el Real Madrid. El 1-2 definitivo lo anotó Solari a dos minutos de la tanda de penaltis. La fórmula fue repetida por el Murcia el siguiente curso. Iván Alonso marcó en la prórroga y dejó fuera a los de Tigre Barrios en primera ronda (31 de agosto de 2005).

Y los penaltis.- Volvió a pisar segunda ronda el Tenerife en los dos cursos siguientes ya con José Luis Oltra en el banquillo. Eliminó en la 07-08 al Poli Ejido (1-0), pero el Málaga truncó luego su camino (1-2). En la siguiente, el Córdoba cayó en el Heliodoro gracias a un gol de Alfaro desde 45 metros (2-1). Luego tocó el Elche. El 1-1 con el que concluyeron los 120 minutos de partido se resolvió en la tanda de penaltis, donde la suerte sonrió a los franjiverdes.

Un sorbo.- Es lo que ha podido tomarse la escuadra insular en las últimas tres ediciones de la Copa del Rey. El Celta, entonces de Segunda, ganó al Tenerife de Primera los dos encuentros (2-1 y 0-1) en la temporada 09-10. Luego fue el Elche, que goleó al equipo que dirigía Gonzalo Arconada (4-1) en lo que supuso el primer aviso serio del desastre que estaba por venir. Ya en Segunda B, la competición del KO preparaba su última humillación a los blanquiazules. Un rival de Tercera, el Cerceda, dejó en la cuneta a los titulares del fallido proyecto de ascenso tinerfeño.

El desafío.- La presente edición de la Copa se presenta, por tanto, como un gran desafío para el Tenerife. El bombo permitió a los blanquiazules quedar exentos de la primera ronda, con lo que superando al Alcoyano habrán llegado más lejos que en las últimas 11 temporadas. Eso sí, todavía deberían sortear un escollo más de Segunda B antes de medirse a uno de los grandes del fútbol español. Y es que el actual formato de competición premia a los conjuntos de la categoría de bronce que alcancen la cuarta eliminatoria. A esos escasos elegidos les tocará un rival de los que juega competición europea: Real Madrid, Barcelona, Valencia, Málaga, Levante, Atlético de Madrid o Athletic de Bilbao.