Con la experiencia que conceden los años y el enorme palmarés de competiciones de alto rango que acumula en la última década, Mario Pestano afronta sus terceros Juegos Olímpicos con la mesura del día a día, del lanzamiento a lanzamiento. Su primera aparición en Londres llegará hoy con la fase de calificación, una ronda que se le ha atragantado en Atenas 2004 y en Pekín 2008 a pesar de que siempre, por calidad y merecimiento, ha debido superar. En China sí que accedió a la fase final, aunque se quedó en la mejora, terminando noveno, con 63.42 metros.

Mentalidad diferente.- Esta circunstancia ha hecho que el discóbolo del Tenerife CajaCanarias afronte con una mentalidad diferente su tercera experiencia olímpica. El periodo de preparación ha estado, como de costumbre, a la altura, y en las últimas competiciones los resultados han confirmado la buena línea trazada junto a su preparador personal, Luis Lizaso. Así que lo primero será incluir su nombre entre los doce mejores que disputarán la final del martes. De hecho, ése es el lugar que ocupa en el ranking mundial, con los 67.15 metros lanzados hace unas semanas en Gran Canaria, una barrera, la de los 67 metros, que ha superado en casi una quincena de veces a lo largo de su trayectoria.

Compite contra él.- De antemano sabe cuáles son sus adversarios. El más complicado responde a su nombre y apellido: Mario Pestano. El atleta criado en Arona sabe de primera mano que si encuentra su mejor versión no tiene techo, incluso, para alcanzar diploma olímpico por vez primera. El alemán Robert Harting, campeón de Europa en Helsinki 2012, parte con la indiscutible vitola de favorito. Solo él y el experimentado lanzador lituano Virgilijus Alekna han estado por encima de los 70 metros. El polaco Piotr Malachowski y el estonio Gerd Kanter también figuran entre los candidatos a merodear la zona de podio mañana.

El sexto de Europa.- Mario Pestano llega a Londres sin hacer mucho ruido, con el sexto puesto en el Europeo, que a fin de cuentas es la mejor balanza internacional, pues la mayoría de discóbolos con mejores marcas proceden de países del viejo continente. Junto al isleño, otro español instalado en el "top ten" mundial, Frank Casañas, que ya fue capaz de lograr diploma olímpico (5º, con 66.49) en Pekín, dejando fuera de la final precisamente a Mario Pestano. La calificación, dividida en dos grupos, se desarrollará en horario matinal (10:00 y 11:25), franja horaria en la que el deportista del Tenerife CajaCanarias se suele sentir especialmente cómodo.

Muy tranquilo.- El tinerfeño llega a la competición de estos juegos muy tranquilo y sabiendo que, después de tantos años en la élite del atletismo mundial, no tiene que demostrarle nada a nadie, pese a que son muchas las voces que suenan cuando el capitán de la selección española no cumple con la expectativas generadas.

Pestano siempre lo da todo en cada lanzamiento y en cada prueba que disputa. Por ello no entiende, muchas veces, la sensación de "fracaso" que sienten algunos cuando no se consiguen medallas. Para él haber estado en tres ocasiones en los Juegos Olímpicos es la mayor premio que puede recibir un deportista y el reconocimiento al trabajo, al sacrificio y al esfuerzo de todos los días para poder mantenerse durante tantos años al nivel de los mejores de la especialidad. Al discóbolo tinerfeño no le gusta "presumir" de historial, pero si que se le reconozca su trabajo.

Hoy debuta en los juegos y lo hará con el espíritu ganador que siempre le ha caracterizado .