El británico Lewis Hamilton (McLaren) le arrebató el liderato del Mundial de Fórmula Uno al español Fernando Alonso (Ferrari) al convertirse en el séptimo ganador en siete carreras disputadas, en el GPde Canadá, en el que el mexicano Sergio Pérez fue tercero.

Hamilton ganó en Montreal por delante del francés Romain Grosjean (Lotus) y de "Checo" Pérez una carrera en la que Alonso -que al igual que los dos anteriores optó por una estrategia a una sola parada- concluyó quinto, tras perder tres puestos en los últimos ocho giros, debido al gran desgaste de sus neumáticos. Alonso no pudo rematar un fin de semana en el que Ferrari había causado buenas impresiones el viernes y el sábado.

Con cielo azul y sol, la salida fue limpia. Hamilton no atacó a Vettel y optó por defender su segundo puesto ante Alonso, ganador en 2006 en el circuito que lleva el nombre de Gilles Villeneuve, mito de Ferrari y de la Fórmula Uno.

Tanto Hamilton, como Vettel y Fernando salieron con neumáticos súper-blandos. El alemán fue el primero en parar, en la vuelta 16, una antes que el inglés. Momentos en los que Alonso lideró provisionalmente la carrera, antes de entrar a garaje en la vuelta 19.

Alonso entró de nuevo primero en pista por delante de Hamilton y de Vettel y si el español enseguida se vio superado por el británico, aguantó sin mayores problemas las embestidas del alemán.

Después de 23 vueltas, Lewis lideraba con 2,1 segundos sobre Fernando, que seguía presionado por Sebastian. Y por detrás, el finés Kimi Raikkonen (Lotus) y Pérez, que, con el compuesto más duro, aún no habían parado, circulaban cuarto y quinto, respectivamente.

Hamilton marcaba vueltas rápidas y fue abriendo hueco. En el ecuador de la prueba, después de 35 giros, el piloto de Stevenage encabezaba con cuatro segundos sobre Alonso, 5.8 sobre Vettel y con una ventaja de 11.7 y 12.5 respecto a Raikkonen y Pérez; con Webber sexto, a 13.7; y Rosberg en séptima posición, a 16.8.

Momentos en los que ya no rodaba el otro español, Pedro de la Rosa (HRT), retirado en la vuelta 26 por un problema de frenos.

Kimi paró en la 40 y Pérez una después, cuando Alonso no conseguía reducir distancias con Hamilton, pero contenía a Vettel.

Hamilton hizo su segundo "pit stop" en la 50, cediendo el primer puesto a Alonso y el segundo a Vettel. Pero comenzó a volar por detrás de ellos. Con Grosjean (Lotus) rodando cuarto, eran interesantes por detrás las batallas de Massa con Pérez y con Rosberg.

Lewis adelantó a Vettel en la recta posterior a la horquilla, a falta de ocho para el final. Y una después, cuando paró Vettel, comenzó su acoso a un Alonso que se defendía con manos de oro hasta que no tuvo más remedio que ceder, en la 64, el bastón de mando, en la zona de DRS en la que, dos vueltas después, le adelantó Grosjean.

Pérez también voló en las últimas vueltas y en la penúltima también superó al astur, que rodaba con el neumático muy desgastado, al igual que lo hiciera Vettel en el tramo final de la carrera. El mexicano, que brilló en Malasia, donde concluyó segundo, firmó ayer su segundo podio desde que pilota en Fórmula Uno y se confirma como una de las revelaciones de la presente temporada.