No va más. La SD Ponferradina es el último rival al que debe derrotar el CD Tenerife para regresar a Segunda División A. En un duelo de recién descendidos, el ganador de la eliminatoria cumplirá su objetivo de la temporada. El otro sufrirá la condena de vivir otro año en una categoría infame. Solo queda una duda por resolver: el orden de los partidos.

El camino.- El equipo berciano acabó segundo del Grupo II, únicamente superado por el ya ascendido Mirandés. Sus 22 triunfos, ocho empates y ocho derrotas (65 goles a favor y 34 en contra) le permitieron clasificarse con holgura para el "play-off". Ya en las eliminatorias ha dejado en la cuneta al Jaén y el Lucena. Con ambos perdió en la ida por 2-1 para superarlos luego en El Toralín (2-0 a los primeros y 3-0 a los cordobeses). En casa solo ha perdido dos encuentros en lo que va de temporada (ante Mirandés y Salamanca). Un dato para la reflexión: lleva 14 expulsiones este curso.

Bloque sólido.- Su entrenador es Claudio Barragán, que tomó las riendas de la Ponferradina en la segunda vuelta del pasado curso. No logró evitar el descenso, pero el exdelantero del histórico "Superdépor" recibió la confianza de los dirigentes leoneses para mantenerse en el cargo. Más de la mitad de la plantilla sabe lo que es jugar en Segunda A. Entre ellos hay un tinerfeño. Es Acorán Barrera, que se formó en las categorías inferiores del equipo insular y es pieza clave en el esquema de su técnico. En el último encuentro ante el Lucena marcó el segundo gol de su equipo. Su máximo goleador es el exjugador de la UD Las Palmas Yuri de Souza (20 goles), que es hermano del extinerfeñista Igor. Hay otro jugador en la "Ponfe" que pasó por las filas amarillas: Dani Carril.

La historia.- Fundado en 1922, el cuadro de El Bierzo es uno de los recién descendidos de Segunda A y un auténtico especialista en estas lides. Y es que ha logrado clasificarse para el "play-off" en las últimas seis temporadas (04-05, 05-06, 07-08, 08-09, 09-10 y la actual), logrando el ascenso en dos ocasiones.

Valoraciones.- "Me daba igual el rival", aseguró Quique Medina en la sala de prensa a la conclusión del partido contra la "Balona". El técnico tinerfeño se limitó a asegurar que "la eliminatoria está al 50 por ciento" y no mostró preferencia por el orden. "Habrá que esperar al sorteo y aceptaremos lo que toque". Lo que sí quiso garantizar es que su equipo está "muy animado y responsabilizado". Por su parte, Víctor Bravo calificó como "un equipazo" a la Ponferradina. "A ver si tenemos suerte en el bombo y nos toca la vuelta en casa. Es lo mejor que nos puede pasar", aseguró el mediocentro, que se perderá la ida.