El Real Madrid deja en el olvido la eliminación copera ante su gran enemigo, el Barcelona, que lejos de agrandar la herida finalmente refuerza la moral del equipo por la imagen ofrecida en el Camp Nou, y recibe hoy en el Santiago Bernabéu al necesitado Real Zaragoza con el único objetivo de disfrutar.
El escenario liguero le sonríe al Real Madrid. Mantiene sus cinco puntos de ventaja con su gran rival y recibe a un Zaragoza en problemas, con ganas de sumar una nueva goleada. Le endosó seis en La Romareda en el inicio de una primera vuelta que acabó siendo de récord histórico en número de goles: 67 goles en 19 jornadas.
En lo deportivo Mourinho tiene la baja de Sergio Ramos por sanción, cumple ciclo de amonestaciones en Liga, más los lesionados Khedira y Ángel Di María. Tiene opciones de entrar en la defensa Albiol, que no cuenta en los últimos partidos. También Granero en la medular aunque es posible que repita la pareja Kaká-Özil que tan buen resultado dio en Barcelona. En punta es el turno de Benzema con Higuaín "tocado" por las dos ocasiones que perdonó en la Copa.
Dos horas más tarde el Villarreal y el Barcelona se medirán en El Madrigal en un partido en el que el equipo local buscará la sorpresa para alejarse del descenso ante un rival obligado a ganar para no distanciarse aún más del Real Madrid.
El Barça afronta con lo justo este desafío después de una semana en la que ha visto incrementar la enfermería con dos nuevos pacientes: Iniesta y Alexis Sánchez.
La ausencia del primero obligará a Guardiola a reformular el centro del campo, en el que se espera a Xavi, Busquets y Cesc. Y la falta de mediocampistas por lesión o, en el caso de Keita, porque está jugando la Copa África, podría empujar al técnico a recuperar a los extremos, con Pedro y Cuenca.
El Barcelona está viviendo un momento muy comprometido, ya que la carga de partidos y lo limitado de su banquillo llevará a los azulgrana a competir al límite.