La búsqueda de soluciones para tratar de que el Tenerife mejore su funcionamiento podría llevar al entrenador Antonio Calderón a decantarse, con vistas al partido del domingo con el Alcalá, por un sistema de juego poco habitual esta campaña; con un volante por de-lante de la línea de cuatro defensas y por detrás de la pareja de mediocentros. O sea, un 4-1-4-1.

Es con lo que ensayó ayer en la práctica que llevó a cabo el equipo en el Heliodoro Rodríguez López. Todavía quedan cuatro sesiones antes de la visita al Municipal Del Val, de manera que aún no hay nada definitivo, pero quizás sí sea un indicio de los planes que tiene en mente el preparador gaditano.

En un ejercicio en el que en-frentó a dos equipos de once jugadores cada uno, coincidieron, con peto rojo, los zagueros Cristóbal, Kitoko, Tarantino y Meji; Pablo Sicilia como pivote defensivo; Medina y Zazo formando la pareja de mediocentros; Chechu Flores y Tacón en las bandas; y Perona como única referencia ofensiva. El portero fue el reserva Razak. En el otro lado del campo, con el mismo sistema, se repartieron Aragoneses; Sergio Rodríguez, Luna, Ayoze, Jesús; Abel; Marcos, Nico, Bravo, Rosquete y Germán. El único que no participó fue Kiko Ratón. El portuense tenía unas molestias físicas y descansó por recomendación de Calderón. Su participación en el partido con el Alcalá no corre peligro.

Si finalmente el técnico opta por dar continuidad el domingo a lo ensayado ayer, recuperará un dibujo por el que ya apostó en la séptima jornada, cuando los blanquiazules se impusieron por 3-0 al Montañeros. En aquella ocasión, Kitoko ejerció de pivote y Marcos y Bravo se situaron unos metros por delante. El Tenerife realizó una de sus actuaciones más completas, por lo que Calderón repitió el domingo siguiente, con el Castilla como rival, y también en La Roda, pero en esta doble salida los resultados no fueron los esperados -derrota y empate-, y el entrenador volvió al 4-4-2 frente al Rayo.

El "once" con el que trabajó Calderón, sin contar todavía con los recién fichados Llorente y Aridane, tendría la principal novedad, en el apartado individual, del debut de Sicilia, que ya jugó como pivote en el último derby en el Heliodoro, con Mandía en el banquillo local.