El eslovaco Peter Sagan (Liquigas) sacó brillo a su debut en la Vuelta al adjudicarse la sexta etapa disputada entre Úbeda y Córdoba, de 193 kilómetros, rematando una jugada maestra del conjunto italiano, en la que Vincenzo Nibali desplazó del podio a "Purito" Rodríguez, mientras que el francés Chavanel se mantuvo líder.

El joven Sagan, de 21 años, una de las perlas del pelotón internacional, remató el festival del Liquigas, que metió 4 corredores en una escapada de cinco hombres que provocó la escuadra italiana en el descenso del Alto del Catorce por Ciento (2a), puerto de nueva denominación, punto clave a 20 kilómetros de meta.

Acompañados por Pablo "Penkas" Lastras, los hombres de Nibali montaron una bajada suicida que rompió el pelotón en mil pedazos y dejó cortados a todos los favoritos. Se presentaron en Córdoba con Sagan al frente, el más rápido de todos, que se impuso a Lastras con facilidad, con un tiempo de 4h.38.22.

Valerio Agnoli, tercero, pasó por delante de Nibali e impidió que su jefe de filas arañara 8 segundos de bonificación. Segundos preciosos, pero el defensor del título recuperó lo que perdió en Valdepeñas de Jaén.

Nibali, el "Tiburón de Mesina", atizó una dentellada de 17 segundos a "Purito", que perdió el tercer puesto en la general, y al francés Sylvain Chavanel, aferrado un día más a la camiseta roja de líder. Algo más retrasados, a 23 segundos, acabaron Wiggins, Brajkovic, Van den Broeck y Menchov.

Otro día con final intenso y sorprendente, como viene siendo habitual en la presente edición. Como el calor que derrite las fuerzas de muchos corredores. El esprint masivo se sigue negando y las escapadas largas no cuajan. En un terreno escarpado no hubo permiso para las aventuras hasta bien entrada la carrera.