La ventaja de 2-0 que lleva el equipo español de Copa Davis frente a Estados Unidos en la eliminatoria de cuartos dejó felices a su capitán Albert Costa y a David Ferrer, que fue el encargado de dar el segundo punto en la primera jornada de individuales.

Ambos se mostraron muy satisfechos en la rueda de prensa posterior al partido en el que Ferrer, número uno del equipo español, venció por 7-6 (9), 7-5 y 6-3 a Andy Roddick.

Al margen de estar a las puertas de otra gran victoria en una eliminatoria de la Copa Davis fuera de España, como sucedió frente a Argentina en el 2008, cuando llegaron a Mar del Plata para conseguir la ensaladera, tanto Ferrer como Costa destacaron que más importante que el 2-0 era la manera como el equipo respondió en el pista rápida montada en el pabellón Frank Erwin Center de la Universidad de Texas.

"Pensaba de verdad que podíamos conseguir un 2-0 al igual que también podría haber sido a la inversa y de ahí que dije desde el principio que no firmaba un 1-1 para la primera jornada", declaró Costa. "Los partidos iban a ser difíciles, igualados, pero podíamos ganarlos y en la definición de los pequeños detalles".

Sin embargo, para Costa el gran éxito del equipo español en la primera jornada fue el gran trabajo y juego que realizaron tanto Ferrer como Feliciano López --número dos--, que en el primer partido ganó a Mardy Fish por 6-4, 3-6, 6-3, 6-7 (2) y 8-6 después de tres horas y 58 minutos de acción.

"Hemos aprovechado las oportunidades que tuvimos, jugando casi al máximo nivel y por lo tanto sabía que podía darse este tipo de resultado", explicó Costa. "Hoy nos han caído los dos puntos a nosotros, pero no debemos olvidarnos que queda la jornada de dobles del sábado y la segunda de individuales del domingo".

Costa dijo que ambas eran "muy complicadas" y por lo tanto debían seguir cautos, humildes y no perder la perspectiva de trabajar para que las cosas siguiesen saliendo en la buena dirección.

El capitán del equipo español, que no quiso confirmar que pareja será la que salga para enfrentarse en el partido de dobles a la número uno del mundo, la formada por los gemelos Bob y Mike Bryan, admitió que los que jueguen van a hacerlo muy bien.

"Hemos logrado que los jugadores que están con el equipo español se sientan integrados dentro y fuera de la competición y que su estancia con nosotros en la Copa Davis, al margen de luchar y representar a su país, también disfruten con el trabajo duro", subrayó Costa. "Desde el inicio dije que habíamos elegido a unos profesionales que sabían como conseguir el título de campeones".

Costa reiteró que "de momento" iban ganando 2-0 la eliminatoria, pero lo ideal sería concluirla como lo hicieron en Argentina, por lo que habrá que esperar al final del domingo.

Mientras, Ferrer, que sólo necesitó dos horas y 46 minutos para ganar a Roddick por quinta vez en las ocho veces que se han enfrentado, dijo que su juego de resto alcanzó casi la perfección y esa es la única manera que le permitió conseguir la victoria.

"No tengo un saque tan potente como el de Roddick por lo tanto necesito que mi resto sea lo mejor posible y eso fue lo hizo posible que lograse la victoria", explicó Ferrer. "Mi resto me da vida y con Roddick era mi mejor arma, al margen que luego me salió todo perfecto como le pasó al equipo".

Ferrer admitió que había salido al campo dispuesto a protagonizar un partido largo frente a Roddick, de ahí que a pesar de tener la ventaja de 2-0 en el tercero siguió con el convencimiento que el jugador estadounidense, ex número uno del mundo, y actualmente en el décimo puesto de la clasificación ATP, es también un ejemplo de lucha, aunque tal vez no pasase ahora por su mejor momento.

El jugador español también tuvo palabras de elogio por el buen compartimiento que hasta ahora habían tenido los miles de aficionados que llegaron a presenciar los partidos y especialmente para ver a Roddick, el hijo adoptivo de la capital del estado de Texas.

"Son muy respetuosos y en ningún momento me he sentido incómodo, todo lo contrario, para nada hemos sentido la presión del público", subrayó Ferrer. "A diferencia de lo que ha sucedido en otras eliminatorias".