Si hay una compañía de automóviles que defina mejor a sus modelos solo con números, esa no es otra que la ya veterana "Peugeot". De sus cadenas de montaje, activas desde 1889, han salido todo tipo de vehículos, pero algunos de ellos han cobrado merecida fama por su alto rendimiento y robustez.

En el artículo de EL DÍA de esta semana vamos a hablar del mítico modelo 403. Todo un símbolo de la automoción mundial, así como local. La gestión de los intereses de la marca gala la defendió con extraordinaria brillantez en nuestra isla el caballero y prestigioso comerciante Fernando González Palenzuela (1901-1975), siendo la "Peugeot" una de las primeras en incorporarse al elenco de marcas que representó y la cual, con el paso de los años, se convirtió en estrella indiscutible de su negocio e incluso del sector privado o comercial en nuestra provincia. No cabe duda de que los "Peugeot 403" destinados a servicio particular su fama o protagonismo es muy inferior a los que desempeñaban las funciones de taxis. Tal vez por su continuo trajín y por la labor desarrollada, algunos de esos modelos se han quedado grabados en nuestras retinas para siempre.

Antes de entrar en el tema que nos ocupa es necesario entregar a los lectores una básica tarjeta de visita del "403". Este modelo fue presentado en el Salón de París de 1955 y sus líneas redondeadas diseñadas por Pininfarina llamaron la atención de los visitantes. Del "403" se realizaron todas las versiones imaginables, pero el común denominador fue su robusto motor de 4 cilindros de 1.500 c.c. y caja de 4 velocidades. Hasta 1966 se mantuvo en producción, año en que es sustituido por el "404".

Para comprobar y corroborar todo lo antes dicho del "Peugeot 403" no hay mejor método que consultar el magnífico libro que recientemente ha editado el escritor y licenciado en ciencias de la información, Marcos Brito, cuya obra la ha titulado "El acontecer del taxi en Arona". Una vez leído se puede apreciar en toda su magnitud que es un auténtico tratado del mundo empresarial de Arona y del mismo reproducimos por gentileza del autor la historia y una foto de algunos de los "403" nativos de ese pueblo.

Debemos decir que la mayoría de los taxis que circularon bajo la contraseña SP lo hicieron en versiones "rubia", algo más largas que los sedanes, ya que éstas tenían 4.610 mm contra los 2.900 mm del resto de la gama.

De aquellos méticos "403" que prestaron servicio público en Arona se encuentran:

TF-19696, licencia número 7, de Sebastián Martín Melo.

TF-18971, licencia número 10, de Eduardo Gómez García.

TF-21425, licencia número 18, de María Mariana Luisa Sierra Pérez.

TF-24525, licencia número 21, de José Antonio Sierra Pérez.

TF-26927, licencia número 16, de Eduardo Gómez García.

Algunos de estos taxis fueron sustituidos por el "modelo 404" o se incorporaron en fechas posteriores ya cuando los del mágico número del "403" habían desaparecido de las cadenas de montaje, pero lo que sí es cierto que la marca gala del león rampante continuó rugiendo y muy fuerte en el sector empresarial del taxi tinerfeño.

En la actualidad Tenerife cuenta con varios supervivientes de aquella época dorada, tanto en versiones de sedanes como en "rubias" y en muy buen estado de conservación.