De las múltiples secuelas que la nefasta temporada 2010/11 ha dejado en los futbolistas del Tenerife, sin duda, a Pablo Sicilia le han tocado las peores. El grancanario pasó por el quirófano a primera hora de la tarde de ayer en la Clínica Cemtro de Madrid. Por la mañana, el doctor Pedro Guillén confirmó que tenía rotos los ligamentos lateral interno y cruzado anterior de la rodilla derecha. El peor diagnóstico posible, que el prestigioso traumatólogo predijo antes de confirmarlo con las pruebas pertinentes. "Pienso que era más de lo que esperaba. Cuando lo exploraba se le ha ido la rodilla y se ha sobresaltado. Entonces entendió que tenía roto el ligamento cruzado", contó en Radio El Día minutos antes de intervenirlo. Por la tarde, el propio doctor confirmó a este periódico que la operación resultó ser todo un éxito.

Larga recuperación.- Si no hay complicaciones, Pablo regresará a las Islas mañana y en siete u ocho días podrá empezar la rehabilitación. No tendrá el pie totalmente inmovilizado más tiempo, aunque para volver a jugar tendrá que pasar por un lento proceso cuya duración inicial oscilará entre seis y ocho meses. "Se le ha sustituido el cruzado anterior por un tendón que tiene que transformarse en un ligamento y eso dura un tiempo", explicó Guillén, mientras garantizaba que en el 90 por ciento de los casos este tipo de dolencias no suelen suponer un problema para las carreras de los futbolistas. De hecho, recordó, él mismo operó a Fernando Redondo por primera vez cuando militaba en el Tenerife (92/93).

Primera lesión grave.- Sicilia se lesionó el sábado cuando en una acción fortuita Guerrero cayó encima de su pierna derecha. "Tenía el pie apoyado y se le cayó encima, forzó la rodilla y noto un crujido", contó Guillén, antes de aclarar que es la sensación habitual en este tipo de lesiones. Es la primera vez que sufre una dolencia tan grave.

Grave obstáculo.- Dado que no podrá volver a los terrenos de juegos hasta principios del próximo año -enero o febrero de 2012-, a priori, es utópico pensar que algún club quiera hacerse con sus servicios en estos momentos. Pero a Pablo, igual que a la gran mayoría de los jugadores con contrato en vigor, el Tenerife ya le comunicó que no entra dentro de sus planes para la campaña venidera -su contrato expira en junio de 2012-. Esta lesión condicionará toda negociación. Una solución podría ser que negocie un nuevo contrato y lo amplíe, al menos, un curso más.

Nota de apoyo del club.- El Tenerife publicó en la que expresaba "su apoyo y ánimo a Pablo Sicilia, después de la lesión de rodilla que se produjo en el último derby ante la UD Las Palmas". "El club blanquiazul le desea una pronta recuperación", añadía el comunicado.

Omar.- El canterano tuvo mucha más suerte. Sufre un esguince en la rodilla izquierda del que se estima que esté recuperado en un mes, el tiempo que duran sus vacaciones. El de La Punta se lesionó instantes después que el grancanario. "Di un pase de interior, el defensa vino fuerte a despejar, me tocó el empeine y me abrió la rodilla", narró ayer en Radio El Día. "Note un dolor súper fuerte, no me podía ni mover. Me probé, pero no podía. Notaba un fuerte dolor cuando frenaba", añadió. Omar forma parte del reducido grupo de futbolistas que aún está pendiente de reunirse con Pedro Cordero. En principio, estima que esta semana sus representantes se trasladarán a la Isla e iniciarán la negociación con el club. Lo pretenden varios equipos de Segunda y también el Villarreal. Pero insiste en que se debe al Tenerife, con quien tiene dos años de contrato. "Si no me quiere algo tendré que hacer. No me voy a quedar sin jugar. Intentaré buscarlo y cogeré la mejor opción", destacó.