El piloto español de Ferrari, Fernando Alonso, lamentó no haber podido subir al podio en Malasia el pasado fin de semana y aseguró que llega a China con el objetivo de aprovechar todas las oportunidades de las que disponga durante la carrera.

"El objetivo del Gran Premio de China será parecido al de Malasia: Defendernos en las calificaciones e intentar aprovechar las oportunidades que nos ofrezca la carrera", indicó ayer Alonso en la página web de Ferrari.

Alonso explicó que en Shangai probará con un nuevo alerón delantero y con varias mejoras aerodinámicas y que, ya desde el viernes, evaluarán el comportamiento de los neumáticos prestando especial atención a la temperatura.

"Siento no haber podido subir al podio en Malasia. Teníamos la posibilidad de hacerlo y habría sido un resultado magnífico, útil también para darnos un empujón desde el punto de vista moral", comentó Alonso sobre la última carrera.

El piloto español reconoció que las cosas "no han ido como queríamos" en la segunda carrera de la temporada y dice que Ferrari ha pagado un "precio muy alto" por la avería en el sistema de gestión del ala posterior móvil, aunque los técnicos ya identificaron y solucionaron el problema. "Si el sistema hubiera funcionado habría podido superar cómodamente a (Lewis) Hamilton en la recta de boxes y no me habría encontrado luchando con él rueda contra rueda, asumiendo riesgos", añadió.

Finalmente, Alonso reconoció que las prestaciones del F150º son mejores durante la carrera que en las sesiones de calificación.