El Tenerife daría un paso de gigante en su lucha por lograr la permanencia si hoy gana al Rayo Vallecano, aunque los tres puntos no le darían para salir del descenso. Si Nástic y Salamanca empatan se quedaría con la decimonovena plaza, a un punto de la salvación. Pero el triunfo se cotiza por otras razones que tienen que ver con la entidad del rival. El líder de Segunda tiene múltiples virtudes reflejadas todas ellas en su situación en la tabla, que es el premio a la mejor racha de la temporada -ha ganado los últimos cinco partidos- . Hoy además aspira a dejar a seis puntos al Betis.

Semanas atrás esta visita hubiera sido temible. Pero el Tenerife ya no es tan débil como hace cinco jornadas, el tiempo que lleva sin conocer la derrota. Aunque, sobre todo, ha sido el triunfo en El Helmántico el que ha acabado por reactivar a un plantel que dice que está en el camino correcto, pero que aún necesita éxitos para curar su autoestima y enamorarse un poco más de la filosofía Tapia. Además, hay una cuestión estadística que hay que tener en cuenta. El Heliodoro, bastión del Tenerife históricamente, se ha convertido este curso en su punto débil -desde la 98/99 no tenía tan malos números, pero estaba en Primera- y necesita recuperarlo.

La baja de Kitoko ha sido el tema de la semana, pues Ricardo no está recuperado y Mikel nunca dejó de llevar el cartel de duda. Todo indica que será Hidalgo el que asuma las labores defensivas en la dupla que formará con Julio. Lo que obliga a mirar hacia el interior diestro para encontrar la novedad. Es probable que Natalio vuelva a jugar por detrás de Nino y entre Juanlu. Aunque no hay que descartar a Kome, que puede ser interior o mediapunta. De resto no se prevé más que el cambio en la portería. Una vez cumplida la sanción lo normal es que vuelva Sergio. El que no ha tenido quebraderos de cabeza esta semana ha sido José Ramón Sandoval. Repetirá el once con el que ganó al Córdoba.