"Jugaremos el partido a muerte". Tras la llamativa promesa que hacía Nino se encuentra una reflexión basada en la situación clasificatoria del Tenerife y que podría agravarse incluso antes de que comience a rodar el balón el domingo -entraría en descenso si el Málaga o el Zaragoza ganan-: "Son tres puntos muy importantes. Estamos cerca de una zona que no nos gusta. Por eso no podemos regalar nada ni pensar en que esto sea una fiesta para el Barcelona. Vamos a darlo todo, a trabajarlo, a disputarlo, ... porque queremos ganar", destacó el delantero ayer.
Lejos de lo que se pueda pensar, el punta almeriense no es un inconsciente. Sabe que enfrente el conjunto blanquiazul se topará con "el mejor equipo del mundo", pero está convencido de que si tanto él como sus compañeros saben buscar su suerte en el duelo la encontrarán: "Si hay algún punto débil en el Barça el domingo será por el trabajo del Tenerife que pasa por insistir, querer el balón, llegar a la portería contraria... Y hay que hacerlo, por encima de todo, con ilusión", comentó.
En la línea anterior, el máximo goleador blanquiazul insistió en que sólo trabajando a tope existirá la posibilidad de que los tres puntos se queden en la Isla: "Estamos en nuestra casa, ante nuestra afición, así que tenemos que darlo todo", dijo. Aunque lo más importante es, a su juicio, que no le regale nada: "Van a sudar bastante para ganar y nosotros, muchísimo. Vengan de la forma que vengan es un equipo a tener en cuenta", advertía descartando que le parezca una ventaja el doble tropiezo en Liga y Copa que han cosechado: "Si te ganan que sean con sus armas, que son muchas y espectaculares. Nosotros tenemos que ponerle las cosas muy complicadas y debemos intentar aprovechar las ocasiones que seguro tendremos", indicó.
Lo que no ve Nino es la necesidad de que el Tenerife cambie su estilo de juego con el objetivo de frenar al equipo de Guardiola: "Sería absurdo estar trabajando tres años igual y porque juegas contra el Barça cambiar, replegarte o esperar a que te meta un baño. Vamos a mantener nuestra filosofía. Sabemos de las virtudes del Barça. Así que teniéndole mucho respeto, cuando tengamos el balón tenemos que intentar jugarlo", explicó. "No vamos a darnos por derrotados de antemano", puntualizó.
Nino dejaba claro en que más allá del nombre del rival, en juego habrán tres puntos importantísimos. De ahí que el principal objetivo del equipo tenga que ser "ponerle las cosas complicadas" al conjunto culé.
Finalmente, el delantero descartó que las molestias que tiene en los isquiotibiales y que le impidieron entrenar con normalidad el miércoles pasado le impidan jugar el domingo.