ALGUIEN dijo una vez que quien tiene un entrenador tiene un tesoro. Tenerife y Barça poseen uno cada uno. El domingo los disfrutaremos. El duelo en los banquillos será precioso. Todos queremos aprender de él. Ante todo, hay que saber que se puede, hay que creer que se puede ganar al Barça. Afortunadamente el fútbol sigue siendo capaz de ilusionarnos y es mucho más que once contra once. Por eso nadie debe dejar de soñar con ganar. Pero ahora centrémonos en nuestro mister, que es el hombre que junto a sus futbolistas nos va a tratar de dar una alegría enorme en forma de puntos. Oltra es táctico y metódico, tiene criterio para los planteamientos y capacidad demostrada para conseguir el equilibrio competitivo. Por eso, en esa sorpresa táctica, en ese esperar a ver lo que nos regala nuestro entrenador en forma de planteamiento, baso muchas de las posibilidades del Tenerife de quedarse con los puntos. Dependeremos de poder discutir y pelear la posesión del balón al Barça, pero más importante aún, serán las transiciones defensa-ataque a la hora de encontrar las respuestas para defender a un equipo que querrá manejar también el balón. Podemos. Sé que será difícil, pero tenemos varios cofres más guardados. Uno en forma de jugadores para los que por mucho que se quiera transmitir que son sólo tres puntos más, seguro estarán más motivados y merecen por su esfuerzo darse un premio de este calibre. Y otro que es la afición por la presión externa que ejerce, no dejando respirar al contrario, llenando el estadio dos horas antes, rugiendo cuando el contrario tiene el balón y llevando en volandas al equipo a la puerta rival, no fallando cuando la ocasión la requiere, ... Quiero terminar compartiendo lo que un día leí en un cartel que colgaba al entrar a uno de los vestuarios de un campo mítico de Primera y que me ha quedado grabado a fuego: " Ganar no consiste en la victoria en sí, ganar es dar siempre todo lo que uno lleva dentro".