La baja de Rafael Nadal en el torneo de Wimbledon, anunciada por el jugador en la exhibición de Hurlingham Club, abre las puertas a Federer para recuperar el puesto de número uno del mundo.

Nadal perdería el número uno si Federer gana el torneo, pero cedería, incluso, el segundo puesto a Andy Murray si es el británico quien perdiera la final ante Federer. Si, por el contrario, Murray ganara esa hipotética final a Federer, Nadal conservaría el número uno y sería el suizo quien retrocediera al tercer puesto.

Las alarmas se dispararon tras ceder Rafa Nadal en los octavos de final de Roland Garros ante Robin Soderling, su primera derrota en París en cinco años de participación, donde había logrado cuatro títulos. Allí comenzó una espiral de sinsabores para el de Manacor.

"Llevo jugando con dolor en mis rodillas varios meses y no puedo seguir así. El dolor me limitaba físicamente ciertos movimientos lo cual hacía que tampoco me encontrara bien mentalmente", dijo Nadal, que luego se sometió a una serie de revisiones médicas con el doctor Ángel Ruiz Cotorro.

El doctor confirmó la lesión y señaló que, tras las pruebas realizadas, Nadal presentaba una tendinitis de inserción de ambos tendones cuadricipitales con ligero edema óseo en ambos polos superiores de rótula".

Será sometido a tratamiento intensivo a base de antiinflamatorios orales, mesoterapia local, más fisioterapia.