Su gran estado de forma y el peso de un escenario como el Camp Nou debería ser suficientes para que el Barcelona solvente mañana la eliminatoria de cuartos de final de la Copa del Rey, después del buen resultado (0-0) que un esforzado Espanyol logró hace una semana en el Estadio Olímpico Lluís Companys.

En la otra eliminatoria, el Sevilla y el Valencia afrontarán una interesante vuelta, pues el 3-2 de la ida deja la vuelta abierta, en la que ambos equipos intentarán disipar las dudas que dejaron en la Liga.