Manolo Martínez se encuentra "mejor" de la sobrecarga muscular que sufre en su pierna izquierda. Sin embargo aún no está "tan bien como quisiéramos". Aunque "la evolución está siendo la correcta" existen muchas posibilidades de que se pierda el partido del domingo en Tarragona frente al Nástic (16:00 horas): "El partido llega y cada vez hay menos tiempo. Esto es cuestión de días y vamos a sopesar la posibilidad de si vale la pena o no arriesgar", comentó ayer. El de Bigastro cree que "sería precipitado arriesgar" a estas alturas de pretemporada y prefiere perderse el partido a sufrir "una recaída". Hoy o mañana se tomará la decisión. El central recalcó que se trata de "una lesión de poca importancia, pero como todas lleva un proceso natural". Por lo pronto, está dentro de los plazos normales.

Un duelo especial.- Lo peor del asunto es que de no obtener el alta Manolo se perderá uno de los partidos más especiales para él del curso: la visita a Tarragona, la que fue su casa durante cuatro años, aunque parece tenerlo asumido: "Voy a ir a coger los tres puntos y luego ya tendré tiempo de saludar a los amigos", comentó ayer. A pesar de que pasó allí "unos buenos años", lo que "más me importa es que el equipo está bien", en la parte alta de la clasificación y "concienciado de que estamos haciendo un trabajo importante".

El Nástic.- Como buen conocedor de la escuadra que entrena Carlos Ferrando, el defensa resaltó que ha formado un plantel como "para estar arriba". De hecho está convencido de que "lo va a estar" al final. Sin embargo, el potencial del Nástic no le inquieta demasiado porque "estamos en una línea muy buena. Lo importante va a ser que ellos no se sientan cómodos", jugando "como lo estamos haciendo". En este sentido, Martínez aseguró que "con la línea que lleva el Tenerife lo podemos poner en un apuro".

Convencido.- Manolo confesó que el pasado sábado lo pasó mal viendo por televisión el partido frente al Castellón: "Tenemos ocasiones, no las logramos materializar y siempre llega el fantasma del Tenerife", declaró. No obstante, al final "me gustó el equipo", tanto que "me di cuenta más que nunca que somos un gran equipo" por "enfrentarnos a un gran rival" y "hacerlo de la manera que lo hicimos". Ello le da que pensar que "tenemos el potencial suficiente para estar peleando en los puestos de arriba durante toda la temporada".

Sueños.- El de Bigastro admitió que antes de empezar la Liga nunca llegó a soñar con la situación clasificatoria en que ahora se encuentra el Tenerife: "Siempre ves lo mejor. La celebración en la Plaza de la Candelaria con el micro", bromeó. Ya en serio, el central recalcó que "la temporada es muy larga. Queda muchísimo y tampoco vamos a vender humo en estos momentos", pues ahora "llega el momento más excitante" del curso. Y lo más importante, según consideró, es que nota como "hay ilusión en el equipo y en la ciudad". Sólo espera que esa fuerza sea suficiente para seguir "estando arriba" dentro de diez jornadas.

El corte.- Manolo está seguro de que tarde o temprano los aspirantes reales al ascenso se van a distanciar del resto de equipos. Personalmente considera que ese "corte" se producirá "dentro de seis jornadas", aunque otros apuestan por otra fecha. En todo caso, cree que la diferencia "será menor" este curso que años anteriores. Lo que no se atreve es a pronosticar quienes "se quedarán arriba". De hecho, "si tuviera cien euros para apostar me iría antes al baloncesto". Lo que desea es que "nosotros estemos ahí".