Según informa el Consistorio en un comunicado, las aguavivas se detectaron el pasado sábado 31 de diciembre, mientras que la Policía Local está vigilando todas las costas del municipio por si tuviera que extender la medida de protección a otras zonas de baño.
Finalmente, desde el Consistorio se recuerda que está prohibido bañarse; que no se debe tocar las medusas aparentemente muertas en la orilla o cerca de ella; que se debe tener especial cuidado con los niños; y que en caso de picadura, no debe tocarse la zona afectada; limpiar con agua salada, nunca con agua dulce, aplicar hielo (de agua salada) y ante cualquier duda acercarse al servicio de Cruz Roja.