El juez imputó ayer al arquitecto Carlos Morales, marido de la princesa Alexia de Grecia, por delitos contra la ordenación del territorio y tráfico de influencias en el "caso Unión", sobre presunta corrupción urbanística y municipal en la isla de Lanzarote.

El magistrado del juzgado de primera instancia e instrucción número 5 de Arrecife, César Romero Pamparacuatro, adoptó esta decisión contra Morales tras tomarle declaración ayer en el juzgado durante cinco horas -desde las 9:30 a las 14:30 horas-.

El juez, que mantiene las actuaciones bajo secreto, no adoptó ninguna medida cautelar contra el arquitecto Carlos Morales, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Canarias.

En la "operación Unión", desarrollada por la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, veintiuna personas han sido detenidas por su presunta implicación en una trama de corrupción municipal y urbanística que afecta a varias instituciones de la isla de Lanzarote, desde el Cabildo insular a los ayuntamientos de Arrecife, Yaiza y Tinajo.

Siete de los detenidos siguen en prisión por decisión judicial y otros catorce en libertad con cargos, mientras que la Guardia Civil ha interrogado, en calidad de imputados, a al menos otras seis personas supuestamente relacionadas con la trama. Entre los implicados figuran políticos y cargos públicos de PSOE, CC, PIL y PNL, funcionarios y empresarios. El 3 de junio, Carlos Morales prestó declaración ante la Guardia Civil como imputado por delitos urbanísticos ante los agentes de la Guardia Civil que investigan la trama de corrupción municipal y urbanística.

Placeres vuelve al Cabildo

Fuentes de la investigación informaron ya entonces de que a Carlos Morales se le imputaba por tráfico de influencias y delito contra la ordenación del territorio en el marco de la "operación Unión".

Por otro lado, el consejero socialista Rubén Placeres decidió reincorporarse ayer a la Consejería de Educación del Cabildo de Lanzarote, del que se apartó "voluntariamente" al ser citado a declarar ante la Guardia Civil en el marco de esta operación. El socialista reconoció que se equivocó al presentar su dimisión de "manera precipitada". "Di el paso desconociendo el alcance de la imputación. Tras declarar, valoré la situación y entendí que los hechos imputados no son constitutivos de delito como quedará demostrado", apostilló.