El Gobierno de Bulgaria, liderado por el populista de centroderecha Boiko Borisov, ha superado hoy una moción de censura, justo cuando el país termina su semestre de Presidencia de la Unión Europea (UE).

Con 131 diputados en contra y 104 a favor, el Parlamento rechazó la moción, impulsada por la oposición socialdemócrata, que pedía la dimisión del Gobierno por lo que considera graves fallos en la gestión de la seguridad nacional.

La propuesta tiene su origen en varias fugas de prisiones, que la oposición ha usado para criticar el mal funcionamiento del sistema penitenciario.

La oposición socialista también acusa al Ministerio Interior de la creciente criminalidad y de la falta de recursos que sufren la Policía y el Ejército.

Las denuncias de la oposición arreciaron después de que dos pilotos murieran al estrellarse recientemente, debido a fallos técnicos, el único helicóptero de que dispone el Ejército para la lucha contra incendios.

Esta segunda moción desde que comenzó la legislatura en marzo de 2017 ha coincidido con el fin mañana de los seis meses de Presidencia búlgara de la UE, que ha tenido en la lucha contra la inmigración ilegal y la protección de las fronteras algunos de sus ejes principales.