Un israelí murió hoy y otros tres resultaron heridos, todos ellos miembros de una misma familia, por disparos de palestinos en una carretera del sur de Cisjordania, informaron fuentes médicas y militares.

Los hechos ocurrieron a primera hora de la tarde al sur del asentamiento judío de Kiriat Arba, en el distrito palestino de Hebrón, donde desde ayer se registra una peligrosa escalada de la violencia.

Las fuentes indicaron que un coche fue tiroteado desde otro vehículo en la carretera 60, que cruza Cisjordania de norte a sur y que el coche se estrelló.

"Los equipos del Maguen David Adom (equivalente a Cruz Roja) decretaron la muerte de un israelí en el lugar de los hechos", dijo el portavoz de ese servicio de emergencia, y agregó que otros tres han sido trasladados a un hospital de Jerusalén.

El muerto ha sido identificado como Mijael Mark, de 48 años, padre de nueve hijos y director del seminario rabínico del asentamiento judío de Otniel, en el territorio ocupado de Cisjordania.

"Alrededor de veinte balas impactaron en el vehículo, que fueron disparadas desde otro coche que huyó de la zona", dijo en rueda de prensa telefónica el teniente coronel Peter Lerner.

Los heridos son su mujer, Java, de unos 40 años y en estado grave; y dos de sus hijos, de 15 y 13 años.

En un principio se habían informado de que uno de los heridos era un bebé, lo que ha sido desmentido.

El suceso se agrega a una cadena de ataques palestinos desde ayer jueves que han causado la muerte a dos israelíes y heridas a otros seis.

Tres de ellos han tenido lugar en el distrito de Hebrón, lo que ha llevado al Ejército israelí a decidir el despliegue en la zona de dos batallones adicionales de infantería y a reducir el tráfico por las carreteras de la zona mediante retenes, señaló el portavoz militar.

Se trata de suplemento de cientos de soldados para reforzar la presencia militar alrededor de Hebrón, donde aún tiene lugar una redada en busca de los autores del ataque.

Desde el jueves han muerto dos atacantes palestinos, una presunta atacante, y un hombre de 62 años por inhalación de gases lacrimógenos en el paso de Qalandia.

La ola de violencia que sacude la región desde octubre ha causado la muerte de 219 palestinos (más de dos tercios de ellos atacantes o presuntos atacantes, según Israel), 36 israelíes y tres extranjeros.