El Gobierno sirio calificó de "grave" y de "provocación" que el Gobierno israelí celebrara ayer un consejo de ministros en el territorio ocupado de la meseta del Golán y anunció que ha pedido al Consejo de Seguridad de la ONU que condene esta acción.

"Hemos reaccionado enviando una carta urgente al Consejo de Seguridad y al secretario general de la ONU pidiéndoles su intervención y que condenen la realización de esa reunión en el Golán", indicó el jefe de la delegación gubernamental siria que participa en negociaciones de paz con la oposición, Bashar Jafaari.

Indicó que en una reunión que acababa de mantener con el mediador de la ONU en estas negociaciones, Staffan de Mistura, le reafirmó la intención de Siria "de recuperar el Golán por todos los medios legales posibles", incluyendo el uso de la fuerza con fines de "autodefensa".

El diplomático sirio sostuvo que una reunión de ese tipo del Gobierno israelí en el Golán "contradice la resolución 457 del Consejo de Seguridad de 1981" que señala que la imposición de la administración y de las leyes israelíes allí "no tienen efectos legales".

"Esto es una provocación de Israel contra el gobierno y el pueblo sirios, y confirma la cooperación de Israel con los terroristas de Al Nusra (la rama siria de Al Qaeda) y Dáesh (el acrónimo árabe del Estado Islámico)", continuó en una comparecencia ante la prensa.

Según el jefe de la delegación siria, su gobierno ha entregado información "irrefutable" a la Oficina de Mantenimiento de la Paz de la ONU, con presencia en el Golán, sobre los supuestos lazos entre Israel y los dos grupos terroristas citados por él.

Por otra parte, Jaafari indicó que había denunciado ante el mediador de la ONU que en la delegación de la oposición siria hay representantes de grupos vinculados con Al Nusra, calificado formalmente como terrorista por el Consejo de Seguridad de la ONU.