La huelga general con la que amenazaba convocar para hoy la Federación de Trabajadores de Israel (Histadrut) quedó aplazada tras un acuerdo in extremis con el Ministerio de Finanzas, informan medios locales.

La central sindical israelí pretendía paralizar todos los servicios públicos como medida de presión para obtener del Gobierno una subida salarial por la carestía de la vida, pero finalmente las partes acordaron que se destinen partidas de 7,5 mil millones de shekels (más de 1.900 millones de dólares) en los próximos cinco años para equiparar los salarios de los funcionarios públicos.

La Histadrut solicitaba inicialmente 11.000 millones de shkeles en subidas salariales.

El Ministerio de Finanzas y la Histadrut han acordado continuar la negociación en otras cuestiones y presentar los progresos en este terreno ante la Corte Nacional del Trabajo el próximo 3 de enero.

El titular de Finanzas israelí, Moshé Kahlón, calificó el acuerdo de histórico y dijo que "tras años de pactos que han ampliado la brecha entre aquellos con salarios elevados y aquellos con salarios bajos en el sector público, estamos anunciando hoy verdaderas noticias".

El secretario general de la Histadrut, Avi Nisenkorn, coincidió en que "hemos hecho hoy una historia socialmente significativa y sin precedentes juntos, hemos mostrado que a través del diálogo real es posible adoptar medidas que no estaban aún en pie. Por primera vez, los acuerdos salariales son una herramienta efectiva para minimizar la brecha para los que menos ganan en el sector público".

La situación de conflicto laboral fue declarada el pasado 25 de noviembre y desde entonces las partes tratan de encontrar una salida a las demandas sindicales de incrementar los salarios públicos un 11 por ciento en los próximos cinco años para paliar su depreciación por la carestía de la vida y de forma retroactiva a 2013.

La amenaza de huelga había llevado a varias compañías aéreas a adelantar decenas de vuelos que estaban programados para el miércoles, y mantenía a todo el sistema educativo público paralizado ante el eventual parón escolar.