El secretario de Estado de EEUU, John Kerry, viajará el próximo lunes a París para asistir a la Cumbre del Clima (COP21), informó hoy su portavoz adjunto, Mark Toner.

Kerry "participará en numerosos actos de la COP21, donde subrayará la importancia de una acción ambiciosa y global para atajar el cambio climático y su impacto devastador en todo el mundo", afirmó Toner en un escueto comunicado, sin dar más detalles.

La nota oficial se divulgó un día después de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, regresara a Washington tras acudir a la COP21, que comenzó este lunes y durará hasta el 11 de diciembre.

En la Cumbre del Clima, que busca alcanzar un acuerdo mundial para frenar el calentamiento de la Tierra, Obama aseguró este lunes que el mundo se halla ante "un punto de inflexión" que supone "el momento en el que decidimos firmemente salvar nuestro planeta".

El mandatario remarcó que Estados Unidos, como primera economía mundial y segundo emisor de gases de efecto invernadero, reconoce su papel en el calentamiento global y asume "su responsabilidad de hacer algo" para encontrar una solución al problema.

Este martes, la Cámara de Representantes de EEUU, dominada por la oposición republicana, votó contra el "Plan de Energía Limpia" del presidente, que tiene como objetivo reducir las emisiones de carbono de las plantas termoeléctricas del país.

El voto tuvo un valor simbólico de rechazo a los planes de Obama contra el cambio climático mientras se desarrolla la COP21, pues el mandatario ha amenazado con vetar toda resolución que socave su política climática, una de las piedras angulares de su legado.

El pasado agosto, el presidente presentó el "Plan de Energía Limpia", que plantea que EEUU reduzca para 2030 en un 32 % las emisiones de carbono de las centrales termoeléctricas respecto a los niveles de 2005.

El plan complementa el objetivo general con el que Estados Unidos se ha comprometido ante la ONU con miras a la COP21.

Esa meta, formalizada en marzo, consiste en que EEUU en total reducirá para 2025 sus emisiones de gases de efecto invernadero, no solo las procedentes de centrales termoeléctricas, entre un 26 % y un 28 % respecto a los niveles de 2005.