La mayoría de los Estados Miembros de la OEA llamaron ayer a un diálogo entre Estados Unidos y Venezuela, en una sesión donde la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, alertó de que las sanciones impuestas por Washington a su Gobierno son el preludio de una "intervención militar" en su país.

Los cancilleres y representantes del continente, reunidos en la Organización de Estados Americanos (OEA) para tratar la escalada de tensión entre Estados Unidos y Venezuela, coincidieron en la importancia de que los dos países conversen para rebajar las tensiones.

La sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA, convocada para escuchar a la canciller venezolana, no resultó en ninguna declaración formal del organismo, a diferencia de lo ocurrido en las citas de la Unasur o el ALBA en los últimos días.

El debate reveló la reacción -que osciló entre el rechazo, la perplejidad y las dudas- de los países del continente ante la orden ejecutiva emitida este mes por el presidente estadounidense, Barack Obama, que declaró una "emergencia nacional" por la "amenaza" de la situación en Venezuela a la seguridad de Estados Unidos.