Los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) ejecutaron ayer a cuarenta miembros de las fuerzas de seguridad iraquíes y a combatientes tribales en la provincia de Al Anbar, en el oeste del país, informó una fuente policial de Irak.

Los extremistas agruparon a los policías y a otros combatientes -que pertenecían al clan Al Bunmar- en la localidad de Balat Hit, a 70 kilómetros al oeste de Ramadi, en Al Anbar, y los ejecutaron a tiros.

Además, irrumpieron en las casas de las víctimas, obligaron a los demás residentes a salir de sus hogares y saquearon sus propiedades.

El jefe de la policía de la provincia de Diyala (este), el general Yamil al Shamari, explicó que las fuerzas de seguridad iraquíes mataron ayer a 37 terroristas, de nacionalidades árabes y extranjeras.

En una rueda de prensa, Al Shamari señaló que se produjo un ataque contra un campo militar de los yihadistas situado en las montañas de Al Hamrin, 50 kilómetros al noreste de Baquba.