El Partido Radical de Izquierdas francés (PRG), último aliado no socialista del primer ministro, Manuel Valls, amenaza con abandonar el Ejecutivo si no se aceptan algunas de sus exigencias de abandonar ciertas reformas liberales, según publicó ayer el diario Le Monde.

El PRG cuenta con tres miembros en el actual Ejecutivo. Los radicales enviaron una carta a Valls en la que piden que se abandone la actual reforma fiscal, los recortes en las ayudas familiares y que se revise la reforma territorial como condición para seguir apoyando al Ejecutivo, en el que cuentan con tres miembros.