Más de 60.000 civiles han huido de sus hogares en el Este de Siria debido a los enfrentamientos entre el Frente Al Nusra, filial de Al Qaeda, y el Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), en la provincia de Deir al Zor (este), según informó el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. El Frente Al Nusra tomó la localidad de Abreeha, hasta ahora en manos del ISIS, en una ofensiva en la que murieron al menos 62 milicianos en los cuatro últimos días. Abreeha quedó desierta, al igual que las localidades de Al Busayrah y Al Zir. Entre las tres localidades tenían unos 60.000 habitantes, según el Observatorio, una organización independiente con sede en Londres pero con una amplia red de informantes en Siria. Según el Observatorio, los islamistas han quemado varias viviendas y el fuego de mortero costó la vida al menos a una niña durante estos combates.