El ministro británico de Exteriores, William Hague, advirtió hoy de que Rusia afronta un deterioro a largo plazo de sus relaciones con la comunidad internacional, con impacto en su economía, si sigue desestabilizando Ucrania.

Hague participó ayer en la reunión en Luxemburgo de titulares de Exteriores de la Unión Europea (UE), en la que los ministros tomaron la decisión de ampliar la lista de rusos y ucranianos sancionados como personas responsables de la violencia registrada en los últimos días en el este de Ucrania y por amenazar la soberanía de ese país.

En declaraciones a la cadena BBC, Hague dijo hoy que su país está dispuesto a apoyar amplias sanciones económicas contra Rusia.

"Rusia no debería subestimar las consecuencias a largo plazo de lo que está pasando", afirmó Hague, para agregar que Moscú tiene que decidir "si quiere diplomacia y una disminución del deterioro a largo plazo de las relaciones con gran parte del resto del mundo, que afectará seriamente la economía rusa".

Según afirmó, el Reino Unido está dispuesto a actuar contra Moscú a pesar de que unas eventuales medidas podrían afectar al centro financiero de Londres pues ha recibido muchos ingresos de Rusia.

En los últimos años, el Reino Unido ha visto un importante aumento de inversiones de multimillonarios rusos, especialmente en el mercado inmobiliario y de divisas.

"Estamos dispuestos a desempeñar nuestro papel en esto. Los asuntos que están aquí en juego son de enorme importancia", dijo.

La situación es delicada en varias ciudades del este de Ucrania después de que separatistas prorrusos ocupasen edificios públicos.

En Luxemburgo, los ministros de Exteriores también señalaron que nuevos pasos por parte de Rusia que sigan desestabilizando la situación en Ucrania podrían "llevar a consecuencias adicionales" para las relaciones económicas entre la UE y Rusia.

Rusia, que cuenta con varias decenas de miles de tropas en la frontera con Ucrania, según la OTAN, asegura que no planea invadir Ucrania, a la que acusa insistentemente de discriminar a los rusoparlantes residentes en el este del país.