El presidente de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento unicameral) de Venezuela, Diosdado Cabello, consideró hoy que la suspensión de la tramitación de visados turísticos en la Embajada de Estados Unidos en Caracas responde a una "represalia" contra el Gobierno venezolano.

"Con toda seguridad tiene que haber algo de represalia", dijo Cabello en una rueda de prensa sobre el anuncio de la Embajada de Estados Unidos en Caracas de suspender, "hasta nuevo aviso", la emisión de visados para turistas que la soliciten por primera vez por no contar con suficiente personal.

En el último año, Venezuela ha expulsado a ocho diplomáticos estadounidenses en medio de acusaciones de supuesta injerencia de EEUU en el país sudamericano y el Gobierno de Washington ha respondido con medidas similares.

El presidente del Parlamento recordó la propuesta hecha por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, el pasado 15 de marzo para que EEUU participe en una comisión sobre Venezuela con un representante que se sume a otro de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y al propio Cabello en representación de Caracas, a la que Washington no ha respondido.

"A nosotros nos parece desde el punto de vista diplomático hasta bueno que no hayan respondido (...) lo están pensando por lo menos", indicó hoy Cabello, al señalar que si EEUU tiene algún problema con sus funcionarios este podría ser un punto de la comisión.

"Estamos dispuesto a colaborar (...) sin retaliación (represalia) de ningún tipo", aseguró.

Venezuela y Estados Unidos atraviesan uno de los peores momentos en sus relaciones diplomáticas desde que en 2010 se quedaron sin embajadores.

Las tensiones aumentaron de nuevo en las últimas semanas después de que el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, revelara que su Gobierno se planteaba la posibilidad de imponer sanciones a funcionarios venezolanos si no veía avances en el diálogo.

En respuesta, el ministro de Exteriores venezolano, Elías Jaua, llamó el día 14 "asesino del pueblo venezolano" a Kerry, algo que el Departamento de Estado calificó de "acusación absurda", y dijo que Venezuela falta "descaradamente a la verdad".

Las protestas contra el Gobierno de Maduro se iniciaron el 12 de febrero pasado y hasta hoy han dejado más de una treintena de muerto; más de 450 heridos, y casi 2.000 detenidos, 121 de ellos aún en prisión.