Al menos 24 personas murieron ayer, entre ellas 14 hombres armados, y otras nueve resultaron heridas en distintos ataques ocurridos en todo el país, que acabaron también con 22 detenidos, informaron fuentes de seguridad.

El mayor saldo de muertos y detenidos fue registrado durante una operación conjunta del Ejército y de la Policía que fue lanzada en las provincias de Salaheddin, Qirquq y Diyala, al norte de Bagdad, donde las fuerzas gubernamentales mataron a 12 hombres armados y detuvieron a otros 16.

Durante esa misma operación, en la que participaron milicianos tribales progubernamentales, las fuerzas se incautaron de una gran cantidad de armas, explosivos y coches bomba.

La fuente añadió que el ejército iraquí mató a dos hombres armados y detuvo a otros seis en una redada desplegada en varios barrios ubicados en el este de la ciudad de Samarra, 40 kilómetros al sur de Tikrit, al norte de Bagdad.

Una fuente del Ministerio iraquí del Interior, informó de que cuatro miembros del Ejército iraquí, entre ellos, un oficial, murieron y un soldado resultó herido en un ataque armado contra un puesto de control de las fuerzas armadas en la población de Al Aqula.