Varios miles de personas se manifestaron ayer en París contra el presidente francés, François Hollande, de quien pidieron su dimisión, en respuesta a un llamamiento público a protestar por la política del jefe del Estado y su gobierno.

Unas 17.000 personas, según la Policía, y 120.000, según los organizadores, desfilaron desde la Plaza de la Bastilla en contra de Hollande, en una convocatoria de varios colectivos que se oponen a diferentes aspectos de la política gubernamental.

Al final de la manifestación algunos grupos de personas se enfrentaron a las fuerzas de seguridad que vigilaban el desarrollo de la protesta en el distrito VII mediante lanzamiento de petardos, cubos de basura y otros objetos, a los que los agentes respondieron con tiros de gases lacrimógenos.