La Fiscalía venezolana ordenó la detención de cuatro comerciantes de Caracas, por la posesión de miles de kilogramos de carne, embutidos y quesos, pertenecientes a las redes gubernamentales Productora y Distribuidora Venezolana de Alimentos (PDVAL) y Mercados de Alimentación (Mercal).

Los propietarios de los restaurantes Yovara, Ferros y Campestre han sido imputados por los delitos de peculado doloso impropio -apropiación intencionada de un bien del Patrimonio Público- en grado de cooperadores inmediatos, asociación para delinquir y boicot. El caso se abrió por las denuncias de vecinos del sector turístico de la parroquia El Junquito, quienes refirieron a las autoridades que a estos comercios ingresaban regularmente grandes cantidades de alimentos.