El balance oficial de víctimas mortales por el paso del tifón Yolanda por el centro de Filipinas se aproxima ya a las 2.000, según el último dato ofrecido ayer por el Centro Nacional para la Gestión y la Reducción del Riesgo de Desastres (NDRRMC). Entretanto, el presidente del país, Benigno Aquino, declaró el estado de calamidad nacional.

Según indicó el portavoz de este organismo, Rey Balido, hasta el momento se han contabilizado 1.774 víctimas mortales en todo el país, 1.660 de las cuales se han producido sólo en las Bisayas Orientales.

Además, 2.487 personas han resultado heridas y otras 82 permanecen desaparecidas. El Yolanda, considerado el cuarto tifón más potente de la historia, ha afectado a casi diez millones de personas en 471 localidades y 51 ciudades de 41 provincias del país.

Más de 430.000 personas han buscado refugio en centros de evacuación temporal, muchos de los cuales también se vieron dañados por el paso del tifón, según el NDRRMC, que ha aclarado que sus cifras se basan en datos confirmados sobre el terreno. El sábado, un responsable policial había hablado de hasta 10.000 posibles víctimas solo en Leyte.

Por otra parte, el presidente Benigno Aquino declaró ayer el estado de calamidad nacional tras los devastadores efectos que ha dejado a su paso por el centro del país el tifón Yolanda durante un discurso televisado a la nación tras visitar ayer las zonas más devastadas.

El presidente explicó que ha tomado esta decisión con el objetivo de acelerar las labores de rescate y de ayuda de emergencia a la población afectada, al tiempo que reconoció que la preparación y organización de estas tareas no está siendo fácil.

La declaración del estado de calamidad nacional permitirá al Gobierno, entre otras cosas, fijar un techo en los precios en los bienes de primera necesidad y vigilar que no se cometan abusos en las ventas de este tipo de bienes así como medicinas y combustible, entre otros.

España enviará dos aviones con ayuda para los damnificados por el tifón Yolanda como respuesta humanitaria que el Ministerio de Exteriores ha cuantificado en total en más de un millón de euros.

De los 200.000 euros que anunció el Ministerio de Exteriores que sería donado a Filipinas, 150.000 se destinarán al fondo de emergencia de Cruz Roja Internacional. Los 50.000 euros restantes servirán como apoyo financiero a la Oficina de Cooperación Española y la Embajada de Filipinas en España por imprevistos que surjan.