La Iglesia Católica de Cuba reafirmó hoy su mensaje a favor de cambios políticos en la isla comunista y, aunque admitió que es "utópico" pensar en elecciones a corto plazo, insistió en reclamar el reconocimiento del pluralismo y la diversidad de opinión.

"Sería un poco utópico imaginar elecciones en un corto plazo, pero al menos que se escuchen voces que no sean las que estén afiliadas en una línea o una orientación oficial estricta", manifestó el secretario adjunto y portavoz de la Conferencia de Obispos Católicos cubanos, José Félix Pérez.

Pérez compareció hoy ante medios extranjeros en La Habana un día después de la divulgación de la carta pastoral "La esperanza no defrauda", donde los obispos cubanos piden que las reformas económicas emprendidas en la isla vayan acompañadas de cambios políticos.

"Como ha venido ocurriendo en el aspecto económico, creemos imprescindible en nuestra realidad cubana una actualización o puesta al día de la legislación nacional en el orden político", defiende la Iglesia en un documento de 43 puntos leído y repartido el pasado domingo en iglesias de todo el país.

"Debe haber derecho a la diversidad con respecto al pensamiento, a la creatividad y a la búsqueda de la verdad", demandan los prelados cubanos, quienes recalcan que Cuba "está llamada a ser una sociedad plural" y la "nación de todos los cubanos con sus diferencias y aspiraciones".

Esta carta pastoral es la más destacada desde "El amor todo lo puede", un crítico documento que la Iglesia Católica presentó en 1993 sobre la situación de la isla en el apogeo del "Periodo Especial" y que "marcó un momento importante en la presencia pública de la iglesia en la sociedad", recordó Pérez.

Veinte años después y con Cuba sumida en el proceso de "actualización económica" impulsado por el presidente Raúl Castro, la Iglesia cubana reconoce que en la isla se han llevado a cabo "algunos cambios" pero opina que todavía son "lentos, pocos y no muy profundos".

Por ello, en "La esperanza no defrauda", los obispos instan a llevar a cabo más reformas, más apertura y que se tenga en cuenta a quienes tienen un pensamiento diferente del oficial.

"Se trata de la expresión de un pensamiento que, por otra parte, no es inédito: es el pensamiento de la Doctrina Social de la Iglesia", agregó Pérez.

Antes de difundir el documento en las iglesias del país, la Iglesia Católica cumplió con su costumbre de enviar esta carta pastoral al Gobierno cubano con la confianza de que lo acoja con "espíritu positivo y constructivo".

Hasta el momento no ha habido reacciones oficiales al documento de la Iglesia Católica, institución que en el año 2010, tras décadas de relaciones de altibajos con la revolución castrista, abrió un inédito diálogo con el Gobierno de Raúl Castro que propició la excarcelación de decenas de presos políticos.

Quienes sí se pronunciaron hoy sobre la carta de los obispos fueron algunos disidentes consultados por Efe como la líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, para quien es "muy importante" que la Iglesia Católica alce su voz "para defender el respeto y la libertad, que es todo lo que necesita todo ser humano y aquí (en Cuba) no la hay".

Por su parte, el opositor Guillermo Fariñas, Premio Sajárov 2010 y miembro del grupo Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), consideró que el manifiesto de la Iglesia es "un llamamiento al diálogo entre cubanos", pero instó a estar "muy atentos" a este "diálogo".

"Queremos un diálogo de participación amplia y no parcializada", subrayó Fariñas.