Los Hermanos Musulmanes denunciaron hoy la detención de al menos 400 de sus dirigentes en los tres últimos días, y acusaron a las autoridades egipcias de haber torturado y calcinado a 36 detenidos que estaban siendo trasladados ayer a una prisión.

Ahmed Abu Baraka, abogado de la Hermandad, aseguró en una rueda de prensa que los responsables de la agrupación han sido puestos en detención preventiva durante 15 días, y se les ha prohibido contactar con sus abogados o recurrir sus órdenes de detención.

Por su lado, el portavoz del denominado Frente de Defensa de los Detenidos, Mustafa Azab, señaló que los cuerpos de los 36 arrestados que murieron ayer en un confuso incidente en el norte de El Cairo permanecen en un depósito de cadáveres, y que las autoridades se niegan a entregarlos a sus familias a menos que estas reconozcan que murieron asfixiados.