Al menos 40 personas murieron ayer, entre ellas civiles y milicianos progubernamentales, en un ataque con proyectiles lanzado por los rebeldes sirios contra un almacén de municiones de la ciudad de Homs.

El impacto de los proyectiles causó una importante explosión, que ocasionó también cerca de 120 heridos, según informaron las fuentes.

Fuentes médicas indicaron que la cifra de víctimas mortales podría aumentar debido al estado crítico en que se encuentran muchos heridos.