Los tres miembros del personal del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) que a comienzos de la semana fueron capturados por individuos armados en las cercanías de Jaar, en Yemen, han sido liberados y se encuentran a salvo junto a sus colegas.
"Estamos aliviados y muy felices de tener a nuestros colegas de vuelta con nosotros", dijo Cedric Schweizer, jefe de la delegación del CICR en Yemen.
"Quisiéramos agradecer a todos los que nos han brindado su apoyo incondicional para que nuestros colegas pudieran regresar sanos y salvos".
El 13 de mayo los tres miembros del personal del CICR, dos extranjeros cuyas nacionalidades no fueron confirmadas y un local, fueron interceptados por hombres armados en las cercanías de Jaar.
Los tres volvían de un viaje cuando fueron interceptados, a pesar de viajar en un vehículo con el logotipo del CICR.
Después de tres días de negociaciones, han sido liberados sanos y salvos.
El CICR está presente en Yemen desde 1962, donde presta ayuda a los civiles afectados por los diversos conflictos que han afectado el país.
El CICR cuenta en la actualidad con una plantilla de más de 200 colaboradores, incluidos unos 50 extranjeros, que trabajan en Saná, Aden, Sadá, Amran y Taiz.