La economía alemana creció un 0,1 por ciento en el primer trimestre de 2013, tras registrar una contracción del 0,7 por ciento en los últimos tres meses de 2012, informó hoy la Oficina Federal de Estadística (Destatis).

La fuente confirmó además hoy que el avance del producto interior bruto (PIB) en 2012 fue del 0,7 por ciento.

El débil crecimiento del primer trimestre de este año fue atribuido en parte a las consecuencias de un invierno especialmente fuerte, que hizo que disminuyera la actividad en determinados sectores de la economía como la construcción.

Los impulsos positivos vinieron casi exclusivamente del consumo privado, que se incrementó en el primer trimestre del año, después de haberse contraído en los tres últimos meses de 2012.

En las inversiones, en cambio, continuó la tendencia negativa del año anterior.

El comercio internacional no tuvo casi repercusiones en el crecimiento, y tanto las exportaciones como las importaciones tuvieron una tendencia a la baja.

En comparación con el mismo periodo del año anterior, el PIB se redujo el 1,4 por ciento, aunque, según Destatis, esto obedece ante todo a que en el primer trimestre de este año hubo más días de fiesta que en el mismo periodo de 2012.

Prescindiendo de ese efecto, el PIB bajó sólo un 0,2 por ciento, señaló.