El Gobierno de Filipinas reclamó hoy al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas mayores garantías de seguridad para las fuerzas de paz emplazadas en los Altos del Golán, tras el secuestro de cuatro cascos azules filipinos por los rebeldes sirios, el segundo caso en poco más de dos meses.

"Filipinas pide al Consejo de Seguridad todos los esfuerzos posibles y que utilice su influencia para la pronta y segura liberación de los cascos azules filipinos, y que vele por el respeto de la libertad de movimiento y seguridad de las fuerzas de paz en todas las misiones de la ONU", reclamó en un comunicado el ministro de Exteriores filipino, Albert del Rosario.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó ayer de la detención de cuatro miembros de la misión de la ONU en los Altos del Golán capturados por una brigada rebelde siria cerca del área de separación entre Siria y esta zona ocupada por Israel.

Este grupo explicó en un comunicado que fuentes de la insurgente brigada Al Muqatel dijeron que tienen a los cascos azules en su poder solo para protegerlos de los enfrentamientos que se registran en la zona.

"Filipinas subraya que la aprehensión y la detención ilegal de las fuerzas de paz son violaciones graves del derecho internacional", señala la nota del departamento de Relaciones Exteriores.

Según el último comunicado de Naciones Unidas, debido a los "fuertes enfrentamientos" de la zona, aún no han podido establecer contacto con los secuestradores para negociar la liberación.

El pasado mes de marzo, en esa misma zona, 21 cascos azules filipinos fueron secuestrados durante unos días también por grupos rebeldes en Deraa, cerca de los Altos del Golán.

La llamada Brigada de los Mártires de Yarmuk los mantuvo retenidos en los alrededores de la aldea de Al Jamlah y los acusó de ayudar a las fuerzas gubernamentales sirias a desplegarse en la zona.

Los observadores filipinos son miembros de la misión internacional, compuesta por unos 1.500 militares de varios países, que supervisa desde 1974 el cumplimiento del alto el fuego entre Israel y Siria en los Altos del Golán, zona ocupada por los israelíes durante la Guerra de los Seis Días, de 1967.