Israel no transferirá este mes los impuestos recaudados para la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en represalia por el reconocimiento, por parte de la ONU, de Palestina como estado observador, en una nueva medida de castigo tras la aprobación, el viernes, de 3.000 nuevas viviendas en las colonias judías.

"No pienso transferir el dinero este mes, lo utilizaré para pagar las deudas que la ANP ha contraído con la empresa de electricidad (de Israel)", anunció el ministro de Finanzas, Yuval Steinitz, en la reunión semanal del Consejo de Ministros.

Steinitz calificó la petición de los palestinos a la ONU de "provocación" y señaló que con el respaldo internacional lo que lo palestinos buscan es "alcanzar un Estado sin tener que reconocer a Israel, sin (comprometerse) al desarme y sin mecanismos de seguridad" para los israelíes.

El presidente palestino, Mahmud Abás, se dio ayer un baño de multitudes a su llegada a la Muqata de Ramala (sede presidencial), donde miles de personas le felicitaron y agradecieron el logro diplomático.

En medio de un mar de banderas palestinas, cánticos nacionalistas y globos con los colores nacionales Abás dijo: "Ahora somos un Estado".