El presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, ha recomendado a España refugiarse "bajo el paraguas" de un rescate europeo como país, en lugar de solicitar únicamente ayuda financiera para su sistema bancario.

En declaraciones al rotativo alemán Börsen Zeitung, Weidmann ha destacado que los balances de los bancos "siempre" son un reflejo de la economía general de un país, a la vez que ha insistido en que España necesita "actuar" ante el elevado desempleo y el déficit de las autonomías.

Asimismo, ha considerado que el mercado de deuda reaccionaría "positivamente" en el caso de que el rescate se extendiera "más allá" de las ayudas al sector financiero.

Respecto a los últimos recortes anunciados por el Ejecutivo español, el presidente del banco central alemán ha remarcado que ponen de manifiesto la necesidad de unas "reformas radicales".

El Eurogrupo aprobó el pasado mes de junio una ayuda financiera de 100.000 euros para sanear el sistema financiero español, pero el Bundesbank decidirá la próxima semana si participa o no.

A diferencia de países como Irlanda, Grecia o Portugal, España ha recibido ayudas sin requisitos macroeconómicos.

FMI y Unión Monetaria

Por otra parte, Weidmann ha insistido en la necesidad de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) en su evaluación del papel de la política monetaria en la crisis del euro tenga en cuenta las características institucionales de la unión monetaria.

Además, criticó las reclamaciones de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) para que el Banco Central Europeo (BCE) intervenga masivamente el mercado de deuda, con el fin de reducir el aumento de costes de interés de países como Italia y España.

Del mismo modo, hizo referencia a la posibilidad de prorrogar los programas de ajuste en los países periféricos como Grecia, destacando que la carga del ajuste en un periodo temporal mayor no va a aumentar la "aceptabilidad" política del "camino elegido".

Por su parte, el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, ha reconocido que los ciudadanos alemanes y europeos se merecen explicaciones claras sobre la actual crisis financiera, las causas y soluciones, y ha admitido que la clase política adolece de una comunicación deficiente hacia la ciudadanía.