Al menos doscientos soldados de las Fuerzas Armadas sirias desertaron hoy en la provincia de Idleb, cerca de la frontera con Turquía, informó el consejero de comunicación del opositor Ejército Libre Sirio (ELS), Fahd al Masri.

Al Masri, que no ofreció más detalles sobre las deserciones, agregó, en un comunicado, que los rebeldes lograron derribar hoy un helicóptero de las fuerzas leales al presidente Bachar al Asad tras fuertes enfrentamientos en la zona de Jan al Subul, en Idleb.

Los opositores Comités de Coordinación Local, que confirmaron el derribo del aparato, apuntaron que al menos tres vehículos blindados del Ejército fueron destruidos durante los choques.

Por su parte, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos señaló que al menos un rebelde y cinco militares perdieron la vida durante los combates en Jan al Subul, mientras que otros cuatro soldados fallecieron por una explosión en un puesto de control en el área próxima de Yabal Zauya.

Entretanto, continúan los choques entre los insurgentes y los efectivos del régimen en las afueras de Damasco, cerca de uno de los palacios presidenciales, donde al menos doce personas han muerto, aunque al Masri no descartó que esa cifra aumente.

Los Comités destacaron que los muertos en las afueras de Damasco hoy son veinte.

El representante del ELS subrayó que los combates se registran en un área entre las localidades de Al Dumair y Al Hama, en la periferia de la capital y próximas al palacio presidencial de la República.

El portavoz del ELS precisó que los leales al presidente Al Asad comenzaron a bombardear sobre las 03.00 hora local (00.00 hora GMT) Al Hama y Qadsaya, donde en solo media hora cayeron 50 proyectiles.

El palacio, uno de los principales de Al Asad, se encuentra en la carretera que une los suburbios de Qadsaya y Al Hama, al oeste de Damasco, con la plaza de los Omeyas, en pleno centro de la capital.

La agencia de noticias oficial siria, Sana, indicó, por su parte, que decenas de "terroristas" murieron hoy en enfrentamientos entre las autoridades y "grupos armados" en Al Hama.

Según Sana, los supuestos terroristas habían bloqueado una carretera para emplearla para el tráfico de armas.

Asimismo, la agencia informó de combates entre las fuerzas gubernamentales y "un grupo terrorista armado" que intentaba obstruir el tráfico por una carretera en Jan al Subul y que abrió fuego contra varios vehículos que pasaban por la vía.

Una fuente de la provincia de Idleb dijo a Sana que las autoridades mataron e hirieron a varios supuestos hombres armados, además de destruir varias furgonetas de los presuntos terroristas, que portaban armas automáticas.

Estas informaciones no han podido ser verificadas de forma independiente debido a las restricciones impuestas por el régimen sirio a los periodistas para trabajar.

Después de dieciséis meses de conflicto, se calcula que han muerto en Siria más de 10.000 personas, unas 230.000 se han desplazado de forma interna y más de 60.000 han buscado refugio en países limítrofes, según datos de la ONU.