Un policía murió y dos civiles resultaron heridos hoy en la ciudad de Kandahar, en el sur de Afrganistán, por un atentado suicida cometido con un automóvil "lleno" de explosivos, dijo una fuente oficial que no descartó que haya más víctimas.

La explosión, de gran intensidad, causó daños de importancia en diversos inmuebles y viviendas de las proximidades, y se teme que algunos vecinos hayan quedado atrapados bajo los escombros, afirmó el portavoz del gobernador provincial de Kandahar, Zalmai Ayubi.

"El atentado se produjo a media mañana en una estación de policía situada a menos de un kilómetro de las oficinas del gobernador provincial", afirmó Ayubi, quien añadió que a mediodía (hora local) todavía no había un recuento definitivo de las víctimas.

A primera hora de la tarde, ningún grupo había reivindicado la autoría del atentado.

Hace dos semanas, la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) informó de que el número de muertos civiles por el conflicto afgano se incrementó por quinto año consecutivo y llegó a las 3.021 personas, 231 más que en 2010.

Según los datos de UNAMA, un 77 por ciento de las muertes fueron atribuibles a ataques de los talibanes, un 14 por ciento a operaciones de fuerzas gubernamentales o aliadas, y el nueve por ciento restante no fue imputable a ninguno de los dos bandos.

Los atentados suicidas y las bombas fueron la principal causa de la muerte de civiles por ataques insurgentes, mientras los bombardeos aéreos se convirtieron en las operaciones más mortíferas llevadas a cabo por las tropas gubernamentales y aliadas.