Un hombre rescatado hoy por los equipos de socorro en el derrumbe de un edificio industrial en la ciudad paquistaní de Lahore, que causó 21 muertos, alertó de que puede haber niños vivos bajo los escombros.

Según el canal televisivo Geo, el hombre rescatado 47 horas después del siniestro relató que escuchó sus voces.

Los equipos de búsqueda han evacuado desde hace dos días a 28 personas con heridas del lugar del siniestro y no saben cuántas más se hallan bajo los cascotes, informó una fuente policial.

El edificio, donde se producían medicamentos, se derrumbó tras la explosión de una caldera.

El inmueble estaba ocupado por unas cien personas, según la Policía, aunque se desconoce cuántas quedaron atrapadas.

Otros dos edificios cercanos resultaron seriamente dañados a causa del accidente.

El derrumbe de viviendas y edificios en mal estado es relativamente frecuente en Pakistán, sobre todo por la explosión de bombonas e instalaciones de gas.