La viceprimera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, dijo ayer que el proceso de independencia de Reino Unido que ha lanzado su Gobierno autónomo no quiere ser un referente para otros países de la UE.

"No somos ningún precedente. Escocia tiene un régimen constitucional particular y diferente", señaló Sturgeon al ser preguntada sobre si se reconocía como ejemplo para otras regiones europeas como Cataluña o País Vasco.

La viceprimera ministra dijo no poder "hacer nada" para evitar que formaciones nacionalistas del resto de Europa vean a Escocia, que quiere celebrar un referéndum en 2014 para separarse de Reino Unido, como un ejemplo a seguir.

Preguntada sobre si tiene algún consejo para que otras regiones de la UE consigan llegar a realizar un periodo de consulta para la independencia, dijo que no es "nadie" para "dar consejos a los demás".

Sturgeon dijo no tener miedo de que España pueda bloquear la entrada en la UE de una Escocia independiente, ya que da por hecho la pertenencia automática de la futura nación independiente en la UE. "Escocia es parte de la UE y lo seguirá siendo. Nuestros ciudadanos ya son ciudadanos de la UE. No va a ser necesario pedir el acceso de nuevo", dejó claro.

Seguir con la libra

Ante un grupo de periodistas, Sturgeon dijo haber escuchado unas declaraciones del ministro de Exteriores español, José Manuel García-Margallo, en las que según éste habría dejado claro, según ella, que el referéndum es cosa de los escoceses exclusivamente.

El plan del Gobierno autónomo escocés en el caso de lograr un resultado positivo en el referéndum de independencia es "seguir con la libra esterlina". Escocia solo se plantea entrar en el euro "si los escoceses así lo deciden y si se dan las condiciones óptimas para que Escocia entre, condiciones que no parece vayan a darse pronto".

Sturgeon explicó que el objetivo de la independencia es "defender mejor los intereses de Escocia de lo que es posible hacerlo formando parte de Reino Unido". "Queremos ser actores internacionales capaces de hablar de igual a igual. Y seguiremos teniendo una relación estrecha de cooperación con las regiones que sigan formando Reino Unido", añadió.

La política escocesa defendió que Escocia "es un país rico" que "pasará a ser el sexto" miembro en importancia económica dentro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).