La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, ha instado hoy al Consejo de Seguridad de la ONU a actuar para que cese la violencia en Siria y dejar claro al régimen de Bachar al Asad que se ha convertido en una amenaza para la paz.

"El Consejo de Seguridad debe actuar y dejar claro al régimen sirio que la comunidad internacional ve sus acciones como una amenaza a la paz y la seguridad", ha dicho Clinton en un comunicado.

La jefa de la diplomacia estadounidense recordó que la violencia en Siria, donde en los últimos días las fuerzas de seguridad del régimen "han matado a cientos de civiles", se ha intensificado "hasta el punto de que la Liga Árabe ha tenido que suspender su misión de observación".

"La violencia debe terminar para que un nuevo periodo de transición a la democracia pueda comenzar", agrega Clinton.

Además, la secretaria de Estado ha anunciado que mañana, martes, asistirá en Nueva York a la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Siria, en la que a su juicio la comunidad internacional "debe enviar un claro mensaje de apoyo al pueblo sirio".

La propuesta árabe que se debatirá en esa reunión plantea, entre otras medidas, que el presidente Bachar al Asad traspase sus poderes al vicepresidente para dar una salida a la crisis.

"Creemos que el Consejo de Seguridad no debería permitir al régimen de Asad agredir al pueblo", ha dicho por su parte el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, en su rueda de prensa diaria, en la que hizo hincapié, al igual que Clinton, en la importancia de que el máximo órgano de la ONU actúe.

En opinión de Carney, la caída de Asad "es inevitable", dado que el régimen "ha perdido el control del país".

Según ha informado hoy la Cancillería rusa, el régimen de Asad ha aceptado la invitación para negociar con la oposición en Moscú, en busca de una solución política del conflicto.

Pero el Consejo Nacional Sirio (CNS), uno de los principales grupos políticos de la oposición, ha rechazado esa invitación, según ha dicho el dirigente Ahmed Ramadán.

La semana pasada Rusia aseguró que vetará en el Consejo de Seguridad de la ONU el proyecto de resolución árabe sobre Siria que pide la renuncia de Asad.

Aunque Carney ha indicado hoy que Washington no conoce los detalles de la invitación hecha por Rusia al régimen y a la oposición para que negocien, ha asegurado que el Gobierno del presidente Barack Obama "apoya los esfuerzos para llegar a una solución política que detenga la violencia en Siria".

EEUU continúa trabajando con la comunidad internacional, incluida Rusia, "para seguir presionando al régimen de Asad" y lograr que "se haga a un lado" para permitir una transición "pacífica" hacia la democracia, ha reafirmado el portavoz de la Casa Blanca.

Desde que estallaron las protestas en Siria en marzo pasado más de 5.000 personas han muerto en la represión practicada por el régimen, según la ONU, si bien Damasco responsabiliza de la violencia a grupos terroristas.